Cuando hablé por primera vez con Nika y Ruslan supe que me iban a traer muchas alegrías.

Ellos son de Rusia y su mayor ilusión era volver a Venecia juntos y compartir la magia de sus calles y de sus innumerables rincones. Imaginad Venecia sobre las 07:00 de la mañana, las calles eran nuestras y el amanecer nos esperaba. Temperatura perfecta y el olor a mar inconfundible se mezclaba con la emoción de lo que íbamos a vivir allí aquel domingo.

Cada historia que os comparto es única y como tal os la muestro con su propia personalidad. Con sus risas, sus caricias y sus miradas para que no perdáis ningún detalle y llegar a comprender el amor en todas sus versiones.

Poder compartir con con ellos su historia desde dentro es algo que me llena inmensamente y vivir estos momentos tan románticos hace que vuelva llena de energía y dispuesta a vivir todas las aventuras que me dejéis documentar.

Inmensamente feliz os invito a que miréis mas allá y os dejéis enamorar <3

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